la no vida de Cú

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Cú no siente mucho. No sale de casa. Hace años que no lo hace. Pero no está enfermo. Y no, no está blanco como la harina, pues tiene un balcón precioso, con plantas muy bien cuidadas. Tampoco está loco. Simplemente, no sale, porque sabe que todo lo que pueda hacer no va a servir para mucho. Su objetivo final al hacer cosas, simplemente, no puede conseguirse. Esa es su conclusión. Y por eso no hace nada.

Todo empezó un dia en que se le ocurrió que era una tonteria hacer la cama, pues al final del dia volveria a deshacerla para meterse dentro. Ésto ya lo habia pensado antes, pero nunca tan profundamente. Comparado con la historia de la Odisea, y el tejer y destejer contínuo de Penélope, la ordinaria tarea de hacer la cama se convierte en todo un reto filosófico. Dejó de hacerla.

En otra ocasión hablando con un amigo le comentaba ante su rostro pasmado e incrédulo que no le gustaba empezar relaciones nuevas. Y que iba a evitar las que ya tenia, pues temia el momento de la ruptura. De hecho, fue la última vez que se vieron. Con el tema de las mujeres, se justificaba así no puedo verte, verás porqué. Podriamos quedar mañana a tomar un café, y pasado iriamos al baile, rozariamos dedos despistados, y tal vez al otro, hariamos el amor apasionadamente. Pero no dejo de pensar que en breve tendremos una discusión, seguro. Y te quedará un regusto desagradable, aunque la resolvamos. Que algun dia diré una palabra fuera de lugar, te ridiculizaré en público o no gustaré a tus padres. Y nos preocuparemos. Sufriremos. Igual que con mi antigua esposa, todo esto se acabará y entonces para que habremos perdido el tiempo?

Por eso, ahora no sale de casa. ¿Para qué? Ahora, por fin, está liberado de todos los problemas y placeres, maldades y suspicacias del mundo. Ahora ya no le pasa nada, y por eso está mejor. No se entretiene por el camino, va cierto hacia sus metas. Nada ni nadie le despista. Sus dias son todos iguales. Ni un sobresalto. No se cuestiona. Ni una coma fuera de lugar, nada que nadie le pueda reprochar. Cero errores, cero cosas que enmendar, eso también cuesta trabajo. No se plantea decisiones vitales, pues ya no le hace falta hacerlo. Ahora está liberado totalmente.

Ahora, simplemente, vive. Si es que eso es vivir.

2 comentaris: Leave Your Comments

  1. No, això no és viure... tal com jo entenc viure. Encara que, segons l'estat d'ànim, fins i tot enveja et pot fer aquesta decissió.

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